‘Lost’ en Cabo Polonio

Apenas desembarcados en nuestro hostal de Montevideo, Chema nos tentó con un destino que sonaba a remoto, Cabo Polonio. Comenzamos a dudar, total, Uruguay no estaba en nuestra ruta de viaje, así que podíamos desviarnos a placer. Playas desiertas, dunas, Parque Natural, pueblo hippie, ni agua corriente ni luz… umm, y de nuevo la pregunta, ¿porqué no?

La tarde cae en Cabo Polonio

La tarde cae en Cabo Polonio

En cinco horas estábamos pisando la arena de Cabo Polonio después de un viaje en autobús y un divertido trayecto en camión por las dunas. Remoto, sí; con más pinta del Fin del Mundo que Ushuaia, sí; rústico, también.

Playa de la Calavera

Playa de la Calavera

No habíamos hecho reserva y dudábamos entre alojarnos en un hostal o alquilar una casita, ambas opciones son bastante caras si se tiene en cuenta las pocas comodidades que uno tiene. Finalmente, nos dejamos llevar por un hippie del lugar que nos alquilaba una chocilla por un buen precio si nos quedábamos cuatro noches, como teníamos prevista.

El problema fue que la vida hippie se nos hizo un poco cuesta arriba al principio.

Nuestra casita

Nuestra casita


La casa por dentro (Por si alguien quiere invertir en inmobiliaria)

La casa por dentro (Por si alguien quiere invertir en inmobiliaria)

No nos importa sacar agua del pozo, ducharnos a cubos o cenar a la luz de la candela, pero el aspecto de los colchones (aún después de haberlos desinfectado con un bote entero de insecticida) nos dificultaba el bienestar en nuestra casita, por lo que finalmente decidimos quedarnos dos noches en vez de cuatro.

El 'bonito' del tó en Polonio

El 'bonito' del tó en Polonio


La bonica del tó tomandose un mate

La bonica del tó tomandose un mate

Cabo Polonio es un lugar muy pintoresco y tranquilo si no se va en pleno verano. El pueblecito, con sus caminos de arena, sus casas hippies decoradas, el perpetuo viento y el faro dominando el saliente de tierra tiene un encanto que a pesar de las primeras dificultades, acabó gustándonos mucho. ¡Hasta vimos un capítulo de ‘Lost’! Eso sí, a la luz de las velas y con la poca batería que nos quedaba en el portátil. Sin duda el mejor lugar para sentirse perdido.

Atardecer en Cabo Polonio

Atardecer en Cabo Polonio


Coloridos juegos 'hippies' para niños

Coloridos juegos 'hippies' para niños

Con un poco más de organización y consiguiendo una casita mejor, que las hay, es un lugar perfecto para pasar 3 o 4 días, quizá más si se practica surf o para mejorar técnicas malabares hippies.

Surfero de tierra firme

Surfero de tierra firme

Haciendo la croqueta en las dunas

Haciendo la croqueta en las dunas

Camión para llegar a Cabo Polonio

Camión para llegar a Cabo Polonio

Eso sí, nosotros los leones marinos sólo los pudimos oír en las rocosas, pero los únicos que vimos en la costa estaban muertos y los había traído la marea a la playa Calavera.



Autor

Aún no estoy segura de si yo llevaré a la mochila o la mochila me llevará a mi.

8 Comentarios en “ ‘Lost’ en Cabo Polonio ”

  1. Vaya, y yo que estaba preocupado porque pensaba que os estábais perdiendo la 6a temporada de LOST… ¡¡Estáis muy guapos los dos, os sienta bien el nomadismo!! 😀

  2. habeis descubierto mi destino!!me ha gustado todo menos lo de los colchones!!hippie si pero un poquito de por favor!!!no?bueno pues no os perdais del to…..!

  3. Este lugar es increible no? Aunque la primera foto es un poco casa de pipi calzaslargas! Jejeje seguid disfrutando!

  4. Que morenitos estáis!! Silvi, me parece que el mate lo venden ya hasta en el Mercadona, así que podrás seguir con tu dosis. Besos!

  5. jajaja, Manuel, no sufras, el mundo está globalizado y conectado a niveles que no esperábamos. Ahora te escribo desde el wifi de un bar en el corazón de Bolivia, así que… conseguir Lost no nos está costando mucho, eso sí, no estamos muy enganchados, creo que es porque hay tanto que ver ahí fuera, que nos hemos ‘desenpantallado’. Así que seguimos estando presentables a pesar de la escasez de espejos? 🙂 Besos!

  6. Hermano, Cabo Polonio te habría encantado, pero eso sí, lo de los colchones fue duro…

  7. Pues ahora estamos aún más ‘renegrios’ del viento del altiplano! Qué buena noticia Belén, mate en el Mercadona! Está bien saberlo, porque me he enganchado. Con unas hojitas de coca a 4.000 metros es mano de santo 😉

  8. Sin duda Cabo Polonio es un lugar muy pintoresco y que aún conserva ese aire bohemio poco explotado, sobre todo en temporada baja, cuando nosotros fuimos. Eso sí, el hippismo te hace dormir en unos sitios de los que ahora nos reímos, pero en su momento daban urticaria.